27 de marzo de 2011

Viviendas por las ramas

En estos últimos días, la opinión pública está debatiendo con un interés creciente los abusos a los que las entidades bancarias someten a los propietarios hipotecados. Ayer, sábado 26 de marzo, la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (ADICAE), convocó una jornada para pedir cambios urgentes en la Ley Hipotecaria actual, como informó el diario Público.

Muchas son las razones que han llevado a este replanteamiento de la situación, en especial, la particularidad legislativa en el caso de impago de la hipoteca: además de devolver el inmueble, el propietario deudor deberá devolver el importe restante, coyuntura que termina de hundir al ya paupérrimo dueño. La edición digital del periódico 20minutos ha publicado hoy una interesante guía que aclara de una manera sencilla las claves de esta situación: el exceso de préstamos hipotecarios concedidos en estos años, la subida del desempleo, el aumento descontrolado del Euribor y que casi el cien por cien de las hipotecas vayan asociados directamente a éste por ser de interés variable han provocado que el número de ejecuciones por impago (cerca de cien mil durante el año pasado) se hayan cuatriplicado desde el inicio de la recesión. Telecinco lo explicaba en un reportaje esta semana, del que se ha hecho eco la web de ADICAE.

© Tecnomedias. Casa en árbol de la calle Divino Pastor (Madrid)
Y, en medio de todo este marasmo económico, en la calle Divino Pastor de Madrid, ha aparecido una casa de madera para pájaros, colgada de un árbol, con el cartel de "SE VENDE" puesto. En pleno inicio de la primavera, posiblemente la crisis ha afectado hasta a los nidos capitalinos, más, en época de recambio de residencia aviar. El detalle creado por un ciudadano anónimo es el mejor símbolo del actual cambio de parámetros económicos nacionales: la gente ya no aguanta más la presión bancaria y la injusticia de tener que dejarse hasta la camisa, literalmente, tras el desahucio, y, las reglas que hasta ahora han valido aún siendo injustas, ya no sirven, y unen a los afectados. ¿El pueblo unido jamás será vencido?.

15 de marzo de 2011

Morente que estás en los cielos

Hace ya tres meses que el flamenco perdió a una de sus figuras más polifacéticas: Enrique Morente, el genio, el alma, el duende. Ayer, el programa de televisión "Para todos La 2" de la segunda cadena de RTVE, estrenó en exclusiva la última canción que grabó el cantaor granadino, en los estudios de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) de Madrid, unos días antes de su fallecimiento. La estremecedora pieza, Ángel caído, del también desaparecido Antonio Vega, forma parte de la película musical que Emilio Borrachina ha dedicado al cantaor granadino, Morente. El barbero de Picasso. La cinta se estrenará en el Festival de Cine de Málaga el próximo 31 de marzo, y llegará a las salas comerciales el 8 de abril.

RadioGranada publicaba ayer las declaraciones de su hija, la también cantaora Estrella Morente, desde Viena, a quién la pérdida de su padre le "ha dejado la vida rota. Rota como un vaso cuando se cae al suelo. Mi padre me ha enseñado y me ha dado las pautas para tener  personalidad propia y creo que eso ha sido su mejor herencia"

© Tecnomedias. Cartel frente a la entrada de la capilla ardiente de Morente (Madrid)
El 14 de diciembre de 2010, día que se abrió la capilla ardiente del maestro Morente en la sede central de la SGAE en Madrid (en la calle Fernando VI), frente a la puerta de acceso apareció este cartel, en el que Camarón de la Isla, con un portavelas encendido, le daba la bienvenida al cielo a su compadre Morente. Su arte sigue vivo en nuestros corazones, y su familia ha abierto una web para recoger todos los comentarios de apoyo y recuerdo: http://familiamorente.com/


Va por tí, estés donde estés.

9 de marzo de 2011

La vida sin guerra, la guerra sin vida


Las revueltas encadenadas de una punta a otra del mundo islámico, desde hace ya casi dos meses, se han visto reflejadas profusamente en todos los medios de comunicación, como no podía ser de otra forma. En algunos casos, como El País, han originado una sección específica denominada "Ola de cambio en el mundo árabe", dentro de la que se encuentra "El año de las revueltas 2011", que intenta analizar el desarrollo de los acontecimientos desde diversos puntos de vista.
© Tecnomedias. Pintada en la Plaza de España (Madrid)
En las calles de Madrid han aparecido diferentes mensajes relacionados con estos sucesos, que, de hecho, han volcado a la vista de todos el apoyo, por ejemplo, a las manifestaciones masivas en Egipto ("print" recogido en la Plaza de España de la capital que reza "Hoy todos somos egipcios"). Pero ese "hoy" y esa buena intención me han hecho reflexionar sobre lo mucho que podemos imaginar sobre sus experiencias y lo poco que sabemos en verdad. Las declaraciones de turistas españoles atrapados en El Cairo sonaban a anécdotas que sumar a la narración de sus vacaciones soñadas. 

© Tecnomedias. Cartel en la estación de Príncipe Pío de Madrid
Ese sentimiento se ha corroborado una semana después cuando encontré, en el acceso a la estación madrileña de Príncipe Pío, este cartel pegado reclamando una "Libia, libre!", pero al que alguien, más cercano a la realidad de aquí que a las bárbaras masacres de allí, había pegado un cartelito en el que "se alquila habitación para una persona...", seguramente, para aprovechar el tirón del mensaje superior.

Esa es nuestra paradoja ahora, la de disfrutar de una vida sin guerra desde hace más de setenta años, la de la solidaridad con los países que están sufriendo cambios dramáticos ya sea por buscar un régimen político más justo, por empezar a reclamar lo que es suyo o para reorganizar los intereses subterráneos de muchos por su petróleo mientras nuestra crisis sigue, nuestro paro cada vez mancha a más gente, y la compra cada vez encoge mas rápido nuestros billetes. Desde el calor de nuestros hogares los desastres de los demás se quedan en distantes titulares destacados.... Al fin, ¿todos somos egipcios?. 

6 de marzo de 2011

Año de nieves...

Uno de los temas recurrentes en los medios de comunicación es la previsión meteorológica, porque su contenido indefectiblemente nos conmina a decidir nuestras acciones y adaptarlas a sus cambios, sobre todo porque sus consecuencias pueden resultar fatales para cada uno de los ciudadanos. En esta semana, medio país ha estado en alerta por los temporales de lluvia y nieve, como nos han informado convenientemente todos los medios por tierra (prensa), aire (radio y televisión) y mar (supongo que todavía en algunos enclaves les llegarán las nuevas de boca de los patrones de barco, ¿no?). EL PAÍS resumía ayer los estragos causados por los elementos climatológicos en toda la península durante los últimos días: en la comunidad de Madrid, la nieve dejó atrapados a miles de conductores en la carretera nacional A-6, que conecta la capital española con La Coruña. El peligro de graves accidentes en las carreteras y las pérdidas materiales y, a veces, humanas, son las noticias que nunca nos gustaría escuchar pero que se repiten en cada invierno y verano por el azote del frío y calor extremos.  

© Tecnomedias. Exterior frutería en el barrio de Malasaña de Madrid
 Pero algunos saben hacer realidad el dicho de "año de nieves, año de bienes", y como la crisis azuza el ingenio, he encontrado en el barrio de Malasaña de Madrid un expositor de una frutería que vendía, perfectamente hechas, el kilo de bolas de nieve a casi cinco euros. La iniciativa, nacida seguramente de la sorna infantil, merece una parada: en este mundo completamente mercantilizado todo se puede ofertar, y si resulta que el beneficio va a ser neto al usar una materia prima que nos proporciona la Naturaleza (como en el caso de las embotelladoras de agua de manantial), mejor que mejor.Con un público objetivo sin diferenciar por clase social, edad, sexo o formación (¿a quién no le gustan las batallas de bolas de nieve?), la propuesta ofrece una fantástica manera de relajarse y hacer un poco de ejercicio para los más vagos, a la vez que engorda los bolsillos de su impulsor. A lo mejor, si le hacemos más caso al refranero popular podremos encontrar un puñado de negocios creativos como este que nos ayuden a salir un poquito de este bache económico mundial. Y si no son rentables, por lo menos habremos conseguido sacarnos una sonrisa y promover la cara más amable del capitalismo.